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Sara Gil Aguirreburualde

Me costó entender cuáles eran las vías para la búsqueda de trabajos de calidad ya que no es algo que te enseñen cuando cursas tus estudios (…) Damos palos de ciego sin saber muy bien qué hacer con la esperanza de haber hecho lo suficiente para que alguien se fije en ti (…) Las emociones que te rodean en esos momentos son muy difíciles de gestionar. Yo me sentí muy perdida, desesperada, frustrada, triste, juzgada e incluso fracasada en muchas ocasiones. De modo que vi el programa 3R como una oportunidad para tener una guía útil.

Finalizas tu formación como psicóloga clínica en 2019 e inicias tu desarrollo profesional en Urbegi, como responsable de Igualdad de Género, y en el Asilo Nuestra Señora de los Desamparados, como psicóloga. ¿Cómo fueron estas primeras experiencias?

Fue un momento de muchas dudas e incertidumbre; no me imaginaba lo que me iba a encontrar ni lo que tenía que hacer. En Urbegi, al ser un contrato de prácticas, me encontré con un tutor maravilloso que me explicó el funcionamiento de la empresa y las labores a desarrollar además de aclarar todas mis dudas. Lo que me ayudó a sentir confianza y empezar a desarrollar mis propias ideas. Sin embargo, en poco tiempo pude ver cómo las labores más administrativas me desmotivaban y buscaba tareas que suponían mayor contacto con la gente.

En el Asilo Nuestra Señora de los Desamparados volví a conectar con todo lo que me apasiona y con el contacto directo. Recuerdo que solicité poder trabajar allí mientras teletrabajaba para Urbegi por las mañanas. De modo que me levantaba a las 6:30h de la mañana y terminaba mi jornada a las 20:30h de la tarde aproximadamente. Además, como acudía a la unidad de positivos de COVID-19, tuve que estar en total aislamiento durante este periodo. Para mí fue una oportunidad que no podía dejar pasar ya que se trataba de uno de los ámbitos en los que quería especializarme tras la carrera. Fue duro. Hablar con los usuarios, ponerles en contacto con sus familias e incluso intentar dedicar un poco de tiempo a los profesionales del centro para ver cómo estaban, pero mereció la pena. Me sentí muy realizada y feliz de poder ayudar.

De enero de 2021 a agosto de 2022 trabajas en el Ayuntamiento de Carranza, primero como Técnica Dinamizadora Cultural en la Kultur Etxea, después como auxiliar administrativa y finalmente como guía turística. ¿Cómo viviste este cambio tan drástico?

En estos casos me vi a mí misma cada vez más en los primeros pasos como trabajadora: cumpliendo con plazos, horarios, cooperando con más trabajadores etc. Esto te da una visión realista de lo que es el mundo laboral y todo lo que eso conlleva.

A pesar de ser labores en apariencia muy diferentes de lo que quería hacer, me enseñaron mucho. Creo que a veces subestimamos muchos trabajos pensando que como no se acercan a nuestro ámbito perderemos el tiempo, pero nada más lejos de la realidad.

Por ejemplo, cuando trabajé de guía turística, llegué a realizar visitas de hasta 80 personas a la vez y descubrí una gran motivación y habilidades personales en mí misma que no pensé que tenía y que a día de hoy aún me acompañan. Sin embargo, cuando trabajé de auxiliar administrativa pensé que iba a ser un trabajo que me iba a gustar, algo que me mantenía en mi zona de confort. Pero reafirmó mi idea de verme más en otro tipo de trabajos de mayor contacto con las personas.

Así, descubrí que todas las labores me ayudan a conocerme, conocer mis límites y a establecer las líneas del camino que quiero recorrer. Y esto tuvo mucho que ver en mis posteriores decisiones.

El mismo 2022 decides realizar con Deusto Alumni el programa 3R (vid. Nota). ¿Qué te animó a dar este paso?

Después de los trabajos que había realizado, sentí un “ahora o nunca” y me puse manos a la obra en una búsqueda totalmente centrada en una pequeña oportunidad en el ámbito de la psicología clínica. Me costó entender cuáles eran las vías para la búsqueda de trabajos de calidad ya que no es algo que te enseñen cuando cursas tus estudios. No sabes bien si debes ir tocando puertas o si cuando envías tu candidatura por las plataformas de búsqueda de empleo llegan a algún lugar.

Damos palos de ciego sin saber muy bien qué hacer con la esperanza de haber hecho lo suficiente para que alguien se fije en ti, cuando la realidad es que no sabemos redactar correctamente un Currículum o enfrentarnos a una entrevista.

Las emociones que te rodean en esos momentos son muy difíciles de gestionar. Yo me sentí muy perdida, desesperada, frustrada, triste, juzgada e incluso fracasada en muchas ocasiones. De modo que vi el programa 3R como una oportunidad para tener una guía útil.

¿Qué aspectos resaltarías de tu participación en este programa?

Me proporcionó un gran alivio no estar sola en la búsqueda. Tener una gran guía como mi orientadora Ainhoa Honorato, fue una bocanada de aire en medio de la tormenta.

Repasamos todas las labores que estaba llevando a cabo para saber si estaba siguiendo el camino correcto.

Me ayudó a actualizar mi curriculum y hacerlo más atractivo, analizó mis hábitos, me ayudó a preparar una entrevista de forma real e incluso repasamos situaciones del pasado en el ámbito laboral para reestablecer mis objetivos y motivaciones en una sola dirección. También realicé talleres que explicaban cómo utilizar las vías de búsqueda de empleo para saber qué hacer y qué no.

Tengo que agradecer esa gran oportunidad que me impulsó hacia el ámbito de la psicología clínica. Ya que ese primer paso fue decisivo para llegar donde siempre he deseado: ejercer en mi propia consulta.

Deseándote lo mejor y agradeciéndote por tu participación en este número, ¿qué recuerdos guardas de tu paso por las aulas de la Universidad de Deusto?

Agradezco mucho los buenos deseos y la oportunidad de participar en esta entrevista. Me ha permitido darle voz a mi experiencia y espero que ayude a más gente a no sentirse sola en esta fase de su vida.

Respecto a la Universidad de Deusto, recuerdo con mucha ilusión y nostalgia todo lo que viví. Tengo gratos recuerdos de muchos de los profesores/as y los medios que se ponían a nuestro alcance. Recuerdo también cómo percibía la idea de la universidad antes de ir. Me resultaba imponente. Allí, todo estuvo tan lleno de ilusión y experiencias que ahora se siente como algo muy fugaz. Pero desde luego hizo una gran mella en mi vida.

La Psicología es mi vida y no entiendo otra forma de vivir que no sea a través de ella. La Universidad de Deusto me ayudó durante y después de la carrera para encontrar mi camino y hacer mis sueños realidad y siempre lo recordaré, a pesar de todo el esfuerzo que supone, como algo que mereció la pena y que me hizo ser quien soy ahora.

De hecho, cada día de camino a mi consulta paso por delante de la universidad y los espacios que frecuentaba con mis compañeros y compañeras para descansar, realizar algún trabajo, antes de un examen o al terminar las clases y la brisa de esas calles me traslada a esa época dibujando una sonrisa en mi cara.

3R Gaztea. Financiado por el Departamento de Empleo, Cohesión social e Igualdad de la Diputación Foral de Bizkaia y desarrollado por Deusto Alumni, este programa tiene por objeto ofrecer acciones de orientación laboral —diagnóstico y elaboración del perfil, el currículo y el itinerario profesionales—, talleres e intermediación laboral a personas tituladas de grado y postgrado de la Universidad de Deusto, menores de 30 años, inscritas en Lanbide y empadronadas en Bizkaia.