
El próximo 30 de mayo la Facultad de Ingeniería celebrará el 25º aniversario de la promoción de personas tituladas en Ingeniería Informática por la Universidad de Deusto en el año 2000. Por fin volverán a encontrarse cara a cara, recordar viejos tiempos, celebrar el reencuentro, compartir experiencias y, por qué no, establecer y mantener relaciones profesionales con otras personas que puedan ser útiles en el futuro para lograr objetivos laborales o empresariales. Esto es, consolidar su networking.
Con una participación estimada de ciento cincuenta personas, quienes hace un cuarto de siglo habían decidido embarcarse en unos estudios que, una vez acabados, llevaban a comenzar una carrera profesional muchas veces en el mundo de la consultoría y, sobre todo, en Madrid, ahora, gracias a su dedicación, esfuerzo y perseverancia, han contribuido a que el amplio campo de las TIC, en todas sus áreas, se haya convertido en uno de los más prósperos y prometedores.
El acto dará comienzo en el Paraninfo de la universidad, donde muchas personas podrán recordar la ceremonia de investidura al finalizar sus estudios. Después de la bienvenida del decano, Asier Perallos, habrá una breve presentación con recuerdos del pasado y el presente y, finalmente, una gran foto de la promoción.
Después, por grupos, harán un recorrido por algunos lugares significativos de la universidad y un paseo por los espacios de la facultad, el edificio ESIDE. La facultad y la universidad con la que se encontrarán veinticinco años después de haber finalizado sus estudios de informática tiene zonas y espacios que no han cambiado mucho aparentemente (el Paraninfo o la Capilla Gótica); otras han ido evolucionando a lo largo del tiempo (como los claustros), pero hay otras que han cambiado sustancialmente (la Plaza de la Memoria, o el edificio Xabier). Con respecto a la facultad, descubrirán lo amplia que es su oferta de grados y posgrados, así como la diversidad de laboratorios de los que dispone. Cuando estos Alumni acabaron sus estudios de Ingeniería Informática, en la facultad se estaban implantando las nuevas ingenierías técnicas. Hoy en día ofrece estudios que abarcan desde la Ingeniería Matemática, la Ciencia de Datos y la Inteligencia Artificial, hasta la Ingeniería Biomédica, pasando por la Ingeniería Robótica, además de las ingenierías más convencionales.
Para terminar, los grupos se reunirán en el claustro donde podrán compartir un cóctel.
Presentamos a continuación el testimonio de algunas personas que asistirán a este encuentro conmemorativo: Ruth Blanco González, Gorka Elexgaray Cruz, Rhut González Pileño y Jon Villamil Zeberio.
¡Gracias por participar en este número de Deusto Alumni Time!
¿Cómo han cambiado las tecnologías desde que te graduaste hace 25 años y cómo ha afectado esto a tu carrera profesional?
Ruth: La tecnología está en constante evolución y esto ha favorecido que podamos, por ejemplo, llevar portátiles cada día más pequeños y ligeros, almacenar un mayor número de información, teletrabajar y/o estar en constante aprendizaje.
Gorka: Supongo que lo normal sería hablar de la IA y de todas las expectativas de cambio que esto nos abre, pero la verdad que a mí lo que más me llama la atención es cómo los desarrolladores hemos sido capaces de anular una y otra vez todos los progresos del hardware haciendo aplicaciones cada vez más complejas y menos eficientes.
Esto es maravilloso para nuestras carreras profesionales, porque da la sensación de que siempre estamos en el mismo punto, pero cada vez nos hacemos más imprescindibles. Antes éramos unos frikis harapientos que cuando la liaban te hacían perder media hora con la cola de la impresora. Ahora somos gente importante que lo mismo te deja tirado tres días en un aeropuerto que te desestabilizan la economía de un país con una “memecoin”.
Otra cosa que me llama la atención es cómo hemos tenido la capacidad de hacer que todo converja hacia maximizar el uso de la energía. En resumen: hace 25 años malgastábamos ancho de banda mandando correo HTML en lugar de texto plano y ahora malgastamos ancho de banda haciendo tutoriales de maquillaje en vídeos de TikTok. Todo ha crecido exponencialmente… qué cosas.
Rhut: Ha habido un gran salto tecnológico durante estos años, que ha llevado además aparejado un gran salto social en la forma de comunicarnos, ocio, …
Cuando estábamos en la carrera teníamos solo direcciones de email que eran las propias de la universidad, los móviles estaban comenzando a popularizarse y mandar algo como un SMS era algo que parecía muy novedoso, en una época que seguíamos utilizando el correo postal y mirando el buzón con ilusión. Videollamadas, compartir contenidos de la forma que lo hacemos ahora, nuestra forma de comunicarnos, de pagar, de relacionarnos…ha sido increíble vivir toda esta evolución tanto como usuario, como con mi trabajo y cuesta trabajo imaginarse donde estaremos dentro de 25 años.
Jon: Las tecnologías han evolucionado de manera vertiginosa. Hemos pasado de conexiones lentas con aquellos módems de ruidos extraterrestres a conexiones 5G y WIFI de alta capacidad. Los teléfonos móviles Android y iPhone llevaron al olvido a los pioneros Blackberry y Nokia que era el rey en el año 2000 con su snake. Las redes sociales han cambiado la forma de comunicarse y mantener el contacto. El vehículo eléctrico y autónomo están ahí. Todos los objetos parecen comunicarse entre sí dando vida a cualquier dispositivo hardware. La tecnología se ha democratizado hasta tal punto, que cualquiera tiene en su mano la inteligencia artificial.
En el plano de los lenguajes de programación y frameworks han aparecido muchas opciones, sin embargo, hay dos lenguajes de nuestra época que siguen siendo muy importantes: Java y Python que, además, han adquirido relevancia con la evolución de la IA y la automatización.
En mi caso, mis últimos 20 años de vida profesional los he desempeñado en Batura Mobile, empresa de Bilbao, especializada en el desarrollo de aplicaciones móviles para empresas. Cuando empezamos no había tarifas de datos y sólo unos pocos modelos tenían bluetooth. Hoy en día, nuestro inseparable móvil es una minicomputadora sofisticada que la empleamos residualmente para hablar por teléfono. Aparte de comunicarnos de formas variopintas, compramos, gestionamos en remoto nuestros dispositivos del hogar, monitorizamos nuestra salud, usamos objetos ya casi vintage como puede ser la linterna, la radio y despertador e ¡incluso podemos entrar en San Mamés!.
¿Qué competencias desarrolladas durante tu formación en ingeniería informática te han sido más útiles a lo largo de tu carrera profesional habida cuenta de los profundos cambios experimentados en este sector?
Ruth: Sobre todo yo que me especialicé en la rama de sistemas y redes fui viendo cómo la programación no se me daba muy bien, pero el “destripar” los entresijos de los ordenadores al principio o conocer la salud de los mismos era lo que más me gustaba. Y así desarrollé mi carrera profesional en el área de monitorización de sistemas y redes. También lo he utilizado como analista de la información en mi emprendimiento de ingenieriadelamor.es haciendo reingeniería inversa.
Gorka: Bueno, en realidad yo diría a los jóvenes que están ahí que no desperdicien la oportunidad de aprender conocimientos de base… de esos que no caducan. Eso es lo que marca la diferencia entre el que es arrastrado por los cambios y el que es capaz de comprenderlos y asimilarlos.
Rhut: Sobre todo la carrera creo que educa y estructura nuestra mente para absorber luego otro tipo de información. Más que conocimientos concretos como tal, creo que nos capacita para luego desenvolvernos en el mundo profesional.
Jon: No recuerdo todas las competencias, pero apoyándome en la IA generativa me dicen que las principales son las técnicas, las analíticas y las de gestión o trabajo en equipo.
Diría que las competencias de gestión son las que más me han ayudado sin ninguna duda, pero siempre con la visión de equipos y sobre la base del conocimiento básico de competencias técnicas. Los lenguajes de programación, las redes, las comunicaciones, nociones de IA y especialmente las relacionadas con las bases de datos o el dato.
Éstas últimas, unidas a las competencias analíticas de pensamiento lógico, mejora de procesos y análisis de datos son las que más me han ayudado desde la óptica de Gestión en la toma de decisiones.
¿Qué esperas de este encuentro conmemorativo?
Ruth: Ver tanto a compañeros como profesores y compartirnos. Al final cada uno ha vivido esta temporada de una manera y siempre es gratificante conocer cómo están el resto de personas que algunas hace 25 años no veo y otras menos porque coincidimos o hemos coincidido en diferentes ámbitos tanto personales como profesionales.
Gorka: La verdad que ni idea. me dejaré llevar. El 50 aniversario me pilla un poco lejos, así que si no estuviese en el 25 tendría una profunda sensación de oportunidad perdida.
Rhut: Me hace mucha ilusión volver a la Universidad, volví hace unos años cuando el Colegio Mayor de Deusto, donde residí, celebró el 50º aniversario. Pero siempre es bueno tener una excusa para volver a Bilbao. La posibilidad de ver a la gente de la carrera creo que es algo único y en muchos casos irrepetible. Estos 25 años han pasado en un suspiro, pero no deja de ser mucho tiempo.
Jon: Será algo muy especial. Espero que este encuentro sea una gran oportunidad para el reencuentro y podamos revivir los recuerdos especiales de nuestra etapa universitaria. Será emocionante compartir experiencias y ver cómo hemos evolucionado profesional y personalmente en estos 25 años. Los debates sobre la evolución tecnológica desde Turbo Pascal seguro que también forman parte de la puesta al día.
En mi caso, aunque he mantenido algo de contacto con la Universidad, ha sido mayoritariamente a distancia y con el profesorado en eventos, por lo que me entusiasma la posibilidad de recorrer nuevamente sus instalaciones, ver los cambios en los edificios y espacios donde nos formamos durante 5 años.
¿Qué recuerdos guardas de tu paso como estudiante por las aulas de la Universidad de Deusto?
Ruth: Guardo un recuerdo súper bonito porque era la universidad que tenía en mis sueños. Aún recuerdo cuando me llegó la carta de que me habían admitido, la llorera que me pegué de alegría. Y luego ir pasando de un edificio a otro nuevo e ir conociendo a mis compañeros tengo muy buen recuerdo. También a medida que iban avanzando los cursos iba teniendo asignaturas nuevas que me gustaban más que el primer año, que por ejemplo física no se me daba nada bien y Sistemas Operativos me encantaba.
Ir conociendo a los distintos profesores y hacer piña con los compañeros para compartir los apuntes, es una etapa muy chula. Yo, además, iba por la tarde y me encantaba el horario, aunque luego en exámenes sufría mucho porque me pillaba el toro y apretaba mucho para no suspender porque quería sacarlo año a año.
Gorka: 1) El día en que nos colamos siendo estudiantes de primero en una clase de quinto para ver que era esa cosa nueva llamada Internet.
2) Las historias de cuando entre tres compis desarrollamos el Simupic, un simulador de un microcontrolador que se acabó usando en las clases. Estuvo bien tener legiones de gruppies persiguiéndonos por los pasillos… bueno… en realidad eso último no ocurrió, pero es porque nos adelantamos a nuestro tiempo.
3) La Semana ESIDE. La gente todavía me recuerda por mi papel de Gran Wyoming… aunque he de decir que para mí el mejor recuerdo es el de cuando ya de profe monté el Tetris a tamaño real. Siempre he querido decir eso de “¡yo traje el Real Tetris a Euskadi!”
Rhut: En mi caso fueron unos años que siempre voy a recordar como algunos de los mejores de mi vida, siendo de Ávila era la primera vez que salía de casa, con todo lo que eso tiene de aterrador e ilusionante a partes iguales. Me ayudo, creo, a formarme como persona además de profesionalmente y ha sido una de las etapas de mi vida que más ha influido en mi desarrollo personal. Desde luego una época inolvidable que siempre recordaré con mucho cariño.
Jon: Guardo muy buenos recuerdos de todo y de todos/as. Empezaría por los compañeros de clase con amistades que aún se mantienen. No puedo olvidar a los compañeros/as del laboratorio de arquitectura y profesorado al completo.
Recuerdo que empezamos comprimidos en el edificio de la cafetería, éramos unas 600 personas por año, pero enseguida inauguramos el edificio de ESIDE donde teníamos todas las comodidades. Lo que peor se llevaba eran las clases con proyector de transparencias, aunque se entendían mejor que las de un genio que daba Compiladores (aquello era una esfera de otra galaxia) … pero ahí estaba la cafetería para salir del paso. No me puedo olvidar de Ángel, Gorka y toda la familia al frente, siempre con buena cara. Tampoco puedo olvidar al personal de limpieza, secretaría y bedeles: Carlos y especialmente Dani que siempre estaba presto a ayudar.
En mi caso, tuve la suerte de colaborar e intentar ayudar en los laboratorios de Arquitectura con Susana Romero. Inauguramos las instalaciones y se hicieron compras ambiciosas: osciloscopios, testers… Empezamos con los boards Ariston y un poco de imaginación. ¡¡¡Aquello era maravilloso!!! Con un PIC, led, lcd, zumbador y 4 cables, se programaban 10 líneas de ensamblador y lo mismo era una lavadora, que un microondas, que la puerta de un garaje.
Los Microbots fueron un gran avance. Eran otra liga. Fomentaba el trabajo en equipo y el gusanillo competitivo de hacerlo bien. Aquello se evaluaba a sí mismo. Andaban o no y por el circuito dibujado o a su aire, aunque también siempre quedaba el premio para el Microbot más original.