Cada vez existe una mayor sensibilización sobre la importancia de cuidar la salud mental, se tiene más información y se habla más abiertamente sobre ello. (…) más frecuentemente las personas buscan ayuda profesional y hay menos prejuicios y una actitud más favorable hacia “acudir al psicólogo”. Y lo que sabemos es que la intervención temprana es importante para que los problemas psicológicos se atajen pronto y no se cronifiquen.
Has estudiado y trabajado como terapeuta, investigadora y docente, en el ámbito de la Psicología Clínica. En la mayor parte de los casos con colectivos vulnerables: personas con diversidad funcional física o sensorial, desempleadas o en riesgo de exclusión, en salud mental infanto-juvenil y de adultos y adicciones. ¿Qué movió a Begoña Rueda a dedicarse a la Psicología Clínica y a ocuparse de estas personas?
Siempre he tenido claro mi interés por la Psicología y la elección de los estudios universitarios. Y dentro de los diferentes ámbitos profesionales de la Psicología, el ámbito Clínico y la intervención directa. Profundicé en el ámbito de la Psicología de la salud y la discapacidad con motivo de la realización de mi tesis doctoral y mis primeros años de experiencia laboral. Posteriormente han sido las diferentes oportunidades laborales en el ámbito municipal y de Osakidetza las que me han permitido trabajar con estos colectivos, y de diferentes edades.
Según el informe de la Organización Mundial de la Salud en cuanto a los trastornos mentales (OMS, 8 de junio de 2022) una de cada ocho personas en el mundo (el 12,5 % de la población) padece un trastorno mental, trastorno que comporta alteraciones considerables del pensamiento, la regulación de las emociones o el comportamiento y que se presenta en una gran variedad de tipos. Aunque existen opciones eficaces de prevención y tratamiento, se constata que la mayoría de las personas carecen de acceso a una atención eficaz.
En tu opinión, ¿la población vizcaína está sensibilizada con esta realidad? ¿Acudimos a tiempo a los servicios que prestáis las y los terapeutas o se espera demasiado para hacerlo?
Cada vez existe una mayor sensibilización sobre la importancia de cuidar la salud mental, se tiene más información y se habla más abiertamente sobre ello. De hecho, no es infrecuente que personas del mundo del deporte o con reconocimiento social hayan ofrecido testimonio sobre su experiencia personal. La pandemia supuso un punto de inflexión también, se tomó conciencia del impacto psicológico y de la importancia de abordarlo.
Cada vez más frecuentemente las personas buscan ayuda profesional y hay menos prejuicios y una actitud más favorable hacia “acudir al psicólogo”. Y lo que sabemos es que la intervención temprana es importante para que los problemas psicológicos se atajen pronto y no se cronifiquen.
PsikoBizi fue un servicio gratuito que COP Bizkaia ofreció durante el confinamiento y pudo atender a más de 500 personas. Desde 2010, con Osakidetza, ha atendido por la Red de Salud Mental de Bizkaia (RSMB) hasta noviembre de 2023 a 50.971 personas adultas y 20.988 menores. Según los datos que aporta la OMS, el 12,5% de la población Bizkaitarra rondaría las 145 mil personas. Todos estos esfuerzos, aunque muy loables, ¿son suficientes o sería necesario algo más?
A los datos de atención en Salud Mental ofrecidos por el servicio vasco de salud hay que añadir la atención que se presta en el ámbito privado, sector que atiende a una amplia población.
La atención psicológica en el sector público requiere la incorporación de más profesionales, ya que estamos lejos de las ratios de psicólogos clínicos que se recomienda en Europa, esto es 20 profesionales por cada 100.000 habitantes.
Es necesario incrementar el número de profesionales de la psicología clínica para garantizar el acceso al tratamiento psicológico en la sanidad pública. Pero también es importante que dicha atención psicológica se ofrezca en el entorno educativo, en el mundo laboral y en los servicios de intervención social. La figura del psicólogo es fundamental también en estos entornos, no solo en el ámbito sanitario.
El lema de este año para el Día Mundial de la Salud Mental (10/10/2024) ha sido “Trabajo y salud mental, un vínculo fundamental”, una llamada a la acción para cuidar la salud psicológica en el ámbito laboral. Según tu experiencia, ¿qué tipo de alteraciones conductuales estáis detectando con mayor frecuencia entre las y los trabajadores?
Las empresas cada día están más concienciadas de la importancia de cuidar la salud mental de los trabajadores. El estrés, la presión, la carga de trabajo y los estilos de vida de nuestra sociedad son generadores de malestar y de pérdida del bienestar psicológico. A eso se unen las circunstancias individuales y familiares que pueden añadir factores estresantes adicionales. Los trastornos de ansiedad y depresión son los más prevalentes entre las y los trabajadores, y así lo confirman las estadísticas.
Para terminar, no sin antes darte las gracias por participar en este número, ¿qué recuerdos guardas de tu paso como estudiante de Psicología en la Universidad de Deusto?
Yo pertenecí a la promoción 1985-1990, cuando la carrera de Psicología era una Licenciatura de 5 años. Guardo muy buen recuerdo de aquellos años como estudiante. Recuerdo el ambiente de estudio en la biblioteca, las peceras y los momentos compartidos en la cafetería. Se celebró el Centenario de la Facultad de FICE en aquella época. Y había diferentes entornos de participación estudiantil, el coro de la Universidad, el club de cine, talleres de Teatro y el Círculo de Actualidad.